1. PRE-CONTEMPLACIÓN:
Beber no es malo. El adicto no es consciente ni de sus problemas ni de las
consecuencias de su conducta adictiva.
2. ESTADIO
DE LA CONTEMPLACIÓN: El adicto empieza a ser consciente de los problemas
derivados de su conducta. Puede valorar abandonar el alcohol, pero no se
termina de comprometer con ello.
3. ESTADIO
DE LA PREPARACIÓN: El adicto tiene la intención de dejar de beber. Realiza
cambios en su conducta adictiva, como por ejemplo disminuir el consumo del alcohol.
A esto se le conoce como conducta manifiesta.
4. ESTADIO
DE LA ACCIÓN: Hace referencia al logro de los 6 meses de sobriedad. El
adicto deja de emitir la conducta adictiva, puede ser la fase más complicada ya
que requiere de un compromiso completo y exige mucho tiempo y un gran esfuerzo.
5. ESTADIO
DE MANTENIMIENTO: El individuo trata de consolidar los logros de la etapa
anterior y prevenir una recaída.
Es muy
importante tener en cuenta que la recaída no tiene por qué darse necesariamente
en la fase de mantenimiento. Es más sencillo que ocurra por ejemplo durante el
estadio de contemplación porque el adicto aún no se ha terminado de
comprometer, pasaría de estar en el estadio de la contemplación al estadio de
pre-contemplación.
Del mismo
modo que, del estadio de mantenimiento, si el adicto se relaja y se confía
puede regresar a la fase de pre-contemplación. Este último caso es menos
recurrente.
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